Liz no encuentra su sitio

La llegada de Liz a la 'casa vieja' ha acabado con el ambiente de 'la casa de la Pradera' que hasta hace poco se respiraba. Julio, que echa de menos a su 'alter ego' Palomares, no termina entenderse con la modelo con la que ha tenido más de un enfrentamiento. Mirentxu espera que la convivencia mejore con el tiempo: "creo que está nerviosa porque le va a bajar la regla o algo. Vamos a darle un margen de maniobra", propone la vasca.

La vida en la Casa 1 transcurre con tirantez. El buen ambiente que dejó Palomares se ha visto enturbiado por la presencia de Liz que no termina de encontrar su lugar en lo que hasta ahora era una pequeña familia.

Pongamos como ejemplo una escena habitual en la 'casa vieja'. Julito entona canciones de amor mientras limpia el baño. Una secuencia costumbrista que hasta hace unos días hubiera completado Palomares haciendo los coros al canario. Sin embargo Liz irrumpe enfadada porque, según ella, acordaron que sería la dominicana quien limpiaría el aseo tras la prueba. A la modelo le preocupa quedar "como una vaga" ante la audiencia.

Mirentxu intenta calmar a Liz, que está fumando un cigarrillo: " tratemos de no agobiarnos porque si no empezamos pronto". Pero a la maniquí no le convence y no está dispuesta a dar el malentendido por finalizado: " lo que me molesta, lo digo".

Horas más tarde, cuando los tres se disponen a dar buena cuenta de la comida, la caribeña no ha olvidado el roce con Julio y vuelve a sacar el tema, acusándole de haberle hecho quedar "como una idiota". Julito intenta evadir la confrontación pero el enfado de la modelo no desaparece fácilmente.

Éste no es el primer roce entre estos concursantes que ya se han enfrentado por la manera de limpiar el wc. Para Liz se dice toilet y utiliza una bayeta errónea para los sanitarios, y una toalla para los espejos. Julito opina que habría que usar limpiacristales, pero según la dominicana no es necesario porque los espejos "no están sucios, sucios".

La última incoporación a la Casa 1 también ha tenido sus pequeños conflictos con Mirentxu, que no está conforme con las horas en las que la modelo se levanta después de trasnochar y que, en alguna ocasión, le ha hecho temer que perderían la prueba: "si estás mal para trabajar estás mal para todo".

Así las cosas, cualquier situación casera es motivo de conflicto, incluso unas sabrosas sardinas que Liz se negó si quiera a probar, despertando la indignación de la vasca: "¿tú vives en el País Vasco o dónde?". El apoyo de Julio a la veterana sólo hace que empeorar la discusión: "no me gusta que me mandes callar", grita la morena.

A pesar de todo Mirentxu y Julito intentan restarle importancia y concluyen: " creo que está nerviosa porque le va a bajar la regla o algo. Vamos a darle un margen de maniobra".

Via telecinco.es